Metodología de trabajo y selección

Nuestro programa de cría esta diseñado para resaltar las características mas destacadas y buscadas por cualquier productor que busca el mayor rinde cárnico. 

Nuestra filosofía es simple: producir un producto eficiente que le permita al productor incrementar sus ganancias. Queremos que nuestros reproductores tengan facilidad de engorde, sean sanos y logren terneros que cuando lleguen al corral de engorde sean eficientes en la conversión de materia seca en kilos de carne. Queremos que nuestras madres sean fértiles y con buena aptitud materna.

Nuestros Toros

Estas características son, en los Toros: frame moderado (4.8); que transmitan facilidad de parto, buen peso al destete y final y que tengan sean eficientes en la trasformación de materia.

En el caso de las vaquillonas, facilidad de parto, aptitud maternal, altos niveles de fertilidad.
Hemos logrado producir Toros con rusticidad, fertilidad y precocidad.

Producimos animales para la producción ganadera, no con fines de exposición o shows.

Nuestros Novillos

son de cuartos posteriores musculosos y prolongados, de buen largo y ancho de lomo de mucha profundidad de costilla. Con una terminación justa y equilibrada permitiendo evitar excesos de grasa. Tienen además, un alto rinde y calidad, sus niveles de marmoleo en ojo de bife dan por encima de los promedios, aportando terneza y palatabilidad.


Son adaptables tanto a los requerimientos de consumo interno como para los mercados externos con calidad de carne gourmet debido a un minucioso programa de selección genética en base de DEPS de performance y méritos de carcaza.

Nuestras Vacas-Vaquillonas

Reúnen, según nuestro criterio, las características mas relevantes de las razas, como ser: excelente fertilidad, destacado fenotipo y, por sobre todo, conformamos un grupo de destacados vientres capaces de lograr las mejores combinaciones genéticas.

Los animales destinados a la reproducción nos aseguran fertilidad, facilidad de parto debido a la conformación pélvica en vaquillonas y vacas; con un producto final de muy buenos valores de peso al deteste.

Nuestras vaquillonas no se entoran antes de los 22/24 meses, ya que consideramos que debido a los ambientes marginales de producción, sería perjudicial entorar a los 15 meses atentando contra su normal crecimiento y desarrollo.

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